Como en la playa al pedregal las olas,
Nuestros minutos a su fin se apuran,
Cada uno desplaza al que ha pasado
Y avanzan todos en labor seguida.
El nacimiento, por un mar de luces,
Va hacia la madurez y su corona;
Combaten con su brillo eclipses pérfidos
Y el tiempo sus regalos aniquila.
El tiempo orada el juvenil adorno,
Surca de paralelas la hermosura,
Se nutre de supremas maravillas
Y nada existe que su hoz no abata.
A pesar de su mano cruel, mi verso
Dirá tu elogio en tiempos que esperamos.
Muy oportuno
ResponderEliminarBuen cuadro, mejor poema
ResponderEliminarBuen cuadro, mejor poema
ResponderEliminarBuen cuadro, mejor poema
ResponderEliminarMe gusta mucho ya que creo que has relacionado muy bien la imagen con el poema
ResponderEliminarMe gusta mucho como has comparado la imagen con el poema y las olas con el paso del tiempo
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